Definitivamente todo en la vida pasa por algo. Me tuvieron que robar mis papeles en este país, para recurrir a la gente que conocía y para que me aconsejaran sobre qué hacer y cómo recuperar mis papeles, y se me dio también por hacer algo que critico mucho: publicarlo en Facebook. En medio de todo el rollo, y leyendo lo que me escribieron, tanto por el interno como comentando la situación en el muro, apareció uno de mis primos hermanos por parte de Papa, quien me insistió hasta el cansancio en que nos viéramos aprovechando que vivimos en la misma ciudad, y además porque la última vez que lo hicimos fue hace al menos 25 años. También me insistió en que sería muy lindo vernos con los otros primos que viven aquí en Miami, a los que tampoco veía desde hacía más de 3 décadas, y en principio tengo que confesar que estaba un poco reacia por los mismos temores con los que crecí con respecto a la familia paterna.
Mi papa y sus hermanos por mil razones que tardaría en exponer, pero que básicamente se resumen en dinero, han peleado durante muchos años y eso hizo que nos llevaran en medio de la pelotera a todos sus hijos y sobrinos, así que muchos de nosotros no nos vemos desde que somos niños. De hecho, algunos ni nos conocemos. Hoy definitivamente celebro la fortuna de que me hayan robado mis documentos y que se me diera por compartirlo, ya que eso hizo que uno de mis primitos quisiera verme después de tanto tiempo, y al reconocer nuestras arrugas, la falta de pelo y los kilitos de mas, me dieran ganas de ver a los demás, motivada en gran parte por la curiosidad de saber que fue de sus vidas, pero no para el chisme o para comparar a quién le va mejor económicamente, sino para recuperar todo el tiempo perdido.. asi como cuando éramos niñitos que jugábamos juntos (y poníamos a David a Jugar a las barbies y cuando mi papa lo encontraba con Alexandra y conmigo lo regañaba por jugar a las muñecas y el solo lo miraba diciendo: “Tio pero que mas hago si estas no quieren patear balón conmigo”…
Nos encontramos y en los abrazos que nos dimos recordamos como esperábamos todos los años las vacaciones porque era el momento en el que los primitos cachacos se iban a Cartagena o los costeños nos íbamos a Bogota. A ninguno de nosotros nos importaba en ese momento, tal como ahora, si tenemos o no dinero, si tenemos buenos trabajos o una buena vida, si estamos bien casados o no, solo estamos haciendo lo que hacíamos cuando éramos niños: reírnos. Además estamos cimentando nuestra relación en el respeto, la ayuda mutua y el amor. Es increíble como nos hemos detenido para recuperar todo de lo que nos perdimos. Estamos apenas conociéndonos y eso que casi todos estamos en el tercer piso y no teníamos ni idea de las personalidades de cada uno. Hasta Kathy me dice que no sabia que tenia semejante prima que parece un “Payaso Indio”.
Increíble como los conflictos de una generación afectan a las siguientes y eso aplica como saben no solo para este tema en particular que es un caso familiar puntual, sino que es un ejemplo de base que sirve para cualquier cantidad de situaciones que están mucho más ligados a la política o a la religión, pero que en nuestro caso nos marco mucho a todos, no solo porque nos alejaron a la fuerza, si no por el mal ejemplo que nos dieron. Hasta nos hicieron participes de sus peleas y algunos intentando ponernos del lado de nuestros papas, terminamos ofendiéndonos entre nosotros, y por correo electrónico que es peor, exponiendo públicamente ante los demás el mismo reflejo de rabia y resentimiento que albergaban los corazones de nuestros papas y tíos. En serio, eso no se hace.
Queridos Papa y Tíos, con respeto les pregunto: Qué carajo les paso? En qué momento mandaron a la basura el regalo más preciado que obtuvieron de mis abuelos al nacer: SER HERMANOS. Todo el mundo sabe que los hermanos son muy importantes en nuestras vidas y aunque puede que no nos llevemos bien todo el tiempo, jugamos un papel positivo en la vida de cada uno, sobre todo cuando somos niños. Los hermanos y hermanas aprendemos uno del otro nuestras primeras lecciones de cómo llevarnos bien con los demás. Somos amigos, compañeros de juegos y confidentes. Juntos aprendemos a relacionarnos con el mundo exterior. Hasta nos protegemos y cuidamos unos a los otros y esto dura para toda la vida. Obviamente pelear entre hermanos es normal y más cuando somos niños que peleamos por juguetes, por echarle la culpa al otro de alguna cagada nuestra o solo por criticarnos y discutir por que si, ya que la rivalidad entre hermanos es parte natural del crecimiento, pero llegar a viejos en la misma estupidez? O es que creyeron que se van a llevar la plata a la tumba cuando se mueran? Ya es hora de que cierren las brechas que los separan y que superen todas las historias porque al final se tienen los unos a los otros hasta que se mueran. No esperen a que los años sigan pasando para recuperar el tiempo perdido. Perdónense de corazón los unos a los otros y construyan una nueva vida, eso les hará muy bien a sus corazones y a sus espíritus. Disfruten como niños y olviden todas las ofensas.
.. y volviendo a mis primos, se me ocurrió crear un grupo de chat y buscarlos y convocarlos a todos a nuestro primer encuentro después de tantos años, y ha generado tal expectativa en nosotros que ha hecho que todos los días como si fuéramos adolescentes, desde que nos despertamos hasta que nos acostamos a dormir nos sintamos acompañados, así estemos en África comiendo insectos como en el caso de Kathy; Alex tomando fotos en Argentina; Taty consintiendo micos en Perú; Diego, Hans, Javier, Karol, Sebas y Cami, haciéndose los que trabajan en Canada; Sharon, Jennifer, Dora (La Nena), Lewis H., David y yo mamando gallo en USA; el combo corroncho (Edgardito, Juancho y Jenny), Ashley, Maricris, Karen y los más chiquitos (Emi y Jacke) en Colombia. Sobre todo para los que estamos sin hermanos o sin papas cerca nos ha hecho sentir más acompañados y nos ha unido intensamente, porque estamos pendientes los unos de los otros y eso no tengo como pagarlo. Es la alegría de tener 23 hermanos y eso no se compara con nada.
Finalmente, muchos me agradecen la iniciativa de crear el grupo y hacer que todos nos encontráramos, pero el agradecimiento es para “El Novis”, porque si él no se pone tan intenso con el tema de vernos y ayudarme en lo que necesitara, yo creo que nunca los hubiera buscado, ya que desafortunadamente crecí con el mismo orgullo pendejo que me inculco mi papa hacia sus hermanos y que aún permanece entre algunos de ellos desde hace tantos años, así que simplemente yo jamás necesite demostrarle a nadie que me hacían falta, por eso nunca los busque. A todos nos pasó lo mismo, es más, deberíamos demandarlos, porque a un niño no se le ensena a odiar a otros y menos a su familia.
Hoy aunque no compartimos las posturas de nuestros papas y tíos, respetamos que se quieran hablar o no, pero los invitamos a que no nos metan en sus líos y a que recuperen el tiempo así como lo estamos haciendo nosotros, anteponiendo el principio básico de que nuestros primeros lazos son los que formamos con nuestros hermanos y hermanas. Nadie más comparte nuestra misma historia familiar. Estoy segura de que mi abuelo Cosme y mi abuela Elisa nunca quisieron y ni siquiera imaginaron que ustedes pelearan de esta manera y con tanto rencor. Nuestros abuelos les enseñaron a apreciar, amar y respetar a sus hermanos, ya que les dieron el mejor regalo que pudieron en ese momento: el regalo de tener un amigo de por vida.
Espero que la lección la hayamos aprendido todos y que esto aquí muera, que no trascienda a otra generación a menos de que Sebas insista en querer tirarse la familia.
Gracias “Novis”, el reconocimiento no es para mi, es realmente para ti. Love u primo Lewis Hernan. :)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario